Dónde quedaron esas batallas épicas de los 70´s y 80´s, dónde quedaron esos protagonistas de ambos clubes que escupían veneno en las palabras y que justificaban sus palabras en el terreno de juego. Ahora se exhiben como vedettes, los partidos se tornan en aburridos empates a 0-0 debido al exceso de “respeto” al rival y por el temor de dejar uno o los tres puntos que les resultan más importantes.
Aquí un vídeo de cómo se vivía la "calentura futbolística" en estos partidos. No con esto quiero decir que la violencia debe imperar entre jugadores o aficionados, símplemete es ver la magnitud que generaba en los propios jugadores este clásico:
Y que decir de esa serie de “clásicos constantes”. Hubo un tiempo donde hasta 3 veces por mes se enfrentaban. En su mayoría en estadios de los Estados Unidos, pues claro lo que interesaba eran las “entrada$ clá$ica$”. Un clásico debe ser el partido esperado (y entre más lejos se coloque en el calendario es mejor).
El intercambio de jugadores…Mención especial. Casos como el de Ramón Ramírez que generó demasiada expectativa y enojo de parte de los millones de aficionados al Guadalajara, cómo soportar que el mejor jugador Mexicano de esa época que jugaba en las Chivas lo hallan mandado a pesar de no querer –palabras expresadas por él- al equipo odiado.
Creo que jamás como ahora quedan a la perfección esta serie de “sinónimos”
Al equipo América le dicen:
IGLESIA ABANDONADA: Porque no tiene cura.
BOSQUE DE ARRAYANES: Porque tiene los troncos más caros del mundo.
PESEBRE: Porque está lleno de figuras pero ninguna se mueve.
HIJO DE PADRES DIVORCIADOS: Porque un domingo lo pasea uno, otro domingo el otro...
TITANIC: Porque todo el mundo lo va a ver pero ya saben que se hunde.
PESCADO BLANCO: Porque no le hace daño a nadie.
TELEVISOR COREANO: Porque no hay técnico que lo arregle.
BICICLETA DE CIRCO: Porque no tiene cuadro.
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